Parejas a dieta: hombres, mujeres y pérdida de peso

Si está haciendo dieta en pareja, es útil comprender algunas de las diferencias entre hombres y mujeres en lo que respecta a la pérdida de peso.

Parte de la razón es que hay diferencias en la forma en que «Marte» y «Venus» abordan todo el proceso de pérdida de peso, por lo que es posible que ni siquiera se pongan de acuerdo sobre el plan de dieta que desean seguir. Además de eso, los hombres tienden a perder peso más rápido que las mujeres, lo que puede hacer que las mujeres sientan resentimiento con los hombres porque les resulta más fácil hacerlo. Pero las parejas pueden hacer dieta juntas, con éxito, siempre que comprendan de dónde viene su pareja. Estas son algunas formas en que las parejas pueden alcanzar sus objetivos de pérdida de peso juntas, mientras mantienen la paz.

Las tasas de pérdida de peso varían entre hombres y mujeres. En general, los hombres tienden a perder peso más rápido que las mujeres, y hay un par de razones para ello. En primer lugar, los hombres son generalmente más altos y tienen más masa muscular que las mujeres, lo que significa que sus tasas metabólicas en reposo (y, por lo tanto, sus necesidades calóricas diarias) son más altas que las de las mujeres. Por lo tanto, pueden reducir más calorías de su ingesta habitual y crear un mayor déficit calórico diario, lo que se traduce en pérdidas más rápidas. En segundo lugar, los hombres tienden a acumular el exceso de grasa corporal alrededor de la cintura, que se pierde más fácilmente que la grasa que las mujeres tienden a acumular en las caderas y los muslos, que es más difícil perder.

Para apoyar a tu pareja: Ambas partes deben reconocer que es poco probable que pierdan peso al mismo ritmo. Las mujeres, traten de no resentirse con su pareja cuando parezca que lo están pasando mejor; y los hombres, el hecho de que su pareja esté perdiendo más lentamente que ustedes no significa que no lo esté intentando.

Los hombres aumentan su actividad, las mujeres tienden a reducir su consumo. Cuando los hombres deciden bajar de peso, es más probable que lo aborden desde el punto de vista de la «pérdida de calorías», es decir, aumentando su régimen de ejercicios. Las mujeres, por otro lado, son más propensas a centrarse en las «calorías que ingieren», haciendo hincapié en la elección más cuidadosa de los alimentos y en consumir menos calorías.

Para apoyar a tu pareja: Una combinación de dieta y ejercicio es el mejor enfoque, no solo para perder peso, sino también para mantenerlo. Ofrézcanse mutuamente: vayan juntos al gimnasio o practiquen un deporte que puedan practicar ambos, y traten de planificar y preparar las comidas juntos tanto como sea posible.

Los hombres prefieren planes de alimentación estructurados, las mujeres prefieren la flexibilidad. Para muchos hombres, perder peso es visto como un desafío o una tarea que debe tacharse de la lista de «tareas pendientes». Una vez que deciden abordar su exceso de peso, es más probable que los hombres opten por un plan más rígido y estructurado del que probablemente no se desvíen demasiado («simplemente dime qué hacer y lo haré»). Por otro lado, a las mujeres les gusta tener más control sobre la elección de los alimentos y tal vez prefieran negociar las condiciones de su dieta («¿puedo añadir un poco de chocolate a mi día?»). Las mujeres también tienen menos probabilidades de hacerlo solas; muchas buscan el apoyo de amigos, grupos o profesionales de la salud.

Para apoyar a tu pareja: Ambos enfoques de la dieta tienen ventajas. Cuando tienes un plan muy estructurado, hay menos decisiones alimentarias que tomar todos los días, lo que tiende a facilitar el proceso. Sin embargo, es difícil mantener un plan muy rígido y estructurado para siempre; en algún momento, es necesario encontrar una forma de comer que funcione a largo plazo. Por otro lado, ser flexible puede ayudarte a crear una forma de comer que no solo te ayude a perder peso, sino también a establecer un patrón de alimentación saludable que puedas mantener. Un buen compromiso para las parejas podría ser seguir un plan rígido durante unas semanas (lo que podría dar un poco de impulso a la dieta) y, después, buscar un plan más flexible que se adapte a su estilo de vida. Y ese apoyo mutuo también puede funcionar muy bien para ambas partes.

Susan Bowerman, M.S., R.D., C.S.S.D., F.A.N.D. — Directora de Capacitación Nutricional Mundial en Herbalife. Susan es dietista registrada y especialista certificada por la junta en dietética deportiva.[the_ad id=' 2596 ']